Hoy se realizó el panel con referentes políticas "Mujeres camino al 2020: escenarios y desafíos", en la ciudad de Villarrica. Con una convocatoria numerosa y plural de mujeres provenientes de varios distritos de Guairá y Caazapá, el panel se enfocó en analizar la situación actual de las mujeres en el campo político y en revisar los desafíos que se presentan de cara a las elecciones municipales del 2020.
En el panel contamos con la presencia de tres referentes nacionales con vasta experiencia en la arena política: Lilian Samaniego, actual senadora nacional y ex presidenta de la Junta de Gobierno por la ANR; Amanda Núñez, ex parlamentaria del Mercosur, ex presidenta del PLRA y actual miembra del comité de dicho partido; y Rocío Casco, ex diputada por Central, ex concejala de Asunción y actual militante del PRF. Las propias asistentes del panel marcaron la agenda de preguntas que las referentes desarrollaron en sus respectivas exposiciones. La apertura estuvo a cargo de Teresita Cortese, actual presidenta de Kuña Róga, organización encargada de la ejecución del proyecto Sumamos Mujeres.
Las panelistas relataron cómo fue su camino para incursionar en la política, y cuáles fueron los desafíos y barreras que tuvieron que enfrentar para llegar a sus espacios actuales. Lilian Samaniego nació en una familia de tradición política: "mis padres me enseñaron que la política es servicio. Llegué a la conducción de mi partido no sin haber pasado por días muy malos. Me dijeron que iba a aguantar quince días: estuve ocho años". Lilian resaltó además la importancia de la unidad entre mujeres: "tuve al acompañamiento de compañeras de mi partido, y de compañeras de otros partidos. Tenemos
que organizarnos, nadie llega de manera individual. La lucha tiene que ser
colectiva". Amanda Núñez afirma: "cuando yo nací, las mujeres casi no teníamos derechos. Hubo generaciones y generaciones de mujeres que aunque no hayan sido vistas, lucharon en todas partes del mundo para abrirnos el camino". Amanda se involucró desde joven en la política: "no quería ser solo la señora de alguien. Entendí que la política es la herramienta más eficaz para generar los cambios que necesitamos en nuestra sociedad". Rocío Casco relató su origen humilde, que marcó su infancia, y las discriminaciones machistas que tuvo que afrontar. "Gané una beca, y fui expulsada por ser hija de madre soltera". Ella comenzó su militancia dentro del Centro de Estudiantes de su colegio, donde consiguieron la primera ley por el boleto estudiantil. "Ver las injusticias de nuestra sociedad me movió a criticar el sistema e involucrarme en política. Luchar por la justicia es lo que me hace feliz".
El doble discurso, los estereotipos sexistas, el acoso, la discriminación y la violencia son obstáculos que todas enfrentaron: ser juzgadas por sus vidas personales, presionadas para ceder en sus pretensiones políticas, ridiculizadas o amenazadas por su condición de mujeres. "La exposición nos cuesta el doble que a los hombres", afirmó Rocío. "Utilizan todas las herramientas que pueden en nuestra contra, para decirnos que la política no es nuestro lugar".
La paridad fue también uno de los temas más resaltantes del panel. "Hemos
aglutinado a través del Grupo Impulsor a mujeres líderes de distintos partidos
y organizaciones sociales, con ayuda de ONU Mujer, la UE, el Ministerio de la
Mujer. Si bien no hemos logrado el objetivo, hemos consolidado un equipo que
por convicción está cada vez más unido, y vamos a volver a
presentar un proyecto porque creemos que nuestra sociedad necesita reconocer al
50% de su población", expresó Lilian Samaniego. Amanda Núñez afirmó: "las mujeres siempre activamos en
comisiones vecinales, en comisiones de fomento urbano, en comisiones de padres,
en comisiones de cooperativas, encabezamos movilizaciones, estamos al frente de las luchas sociales. En política, buscamos que las mujeres
buscamos ser escuchadas y tener la misma fuerza. Para que la democracia sea plena,
tiene que haber paridad".
"Queremos una sociedad donde se respete la dignidad de las mujeres paraguayas. donde nuestras jóvenes tengan la oportunidad de acceder a educación y trabajo, donde el aporte de cada profesional, cada campesina, cada estudiante, cada ama de casa, cada funcionaria, sea reconocido. Solamente unidas podemos lograrlo".
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